viernes, 1 de febrero de 2019

CEPILLADO DE DIENTES

Las 6 cosas que hacemos mal al lavarnos los dientes
  1. Mojar el cepillo antes de lavarnos los dientes
    Pasar agua por el cepillo antes y/o después de poner la pasta es un gesto muy habitual que la mayoría realiza al lavarse los dientes, pero hacerlo puede hacer perder eficacia. Es mejor que el cepillo esté seco para que, de este modo, se arrastre mejor la suciedad y se eliminen mejor los restos de alimentos. Mojándolo además, generamos más espuma de la necesaria para un correcto cepillado.
  2. No dedicar el tiempo suficiente
    La teoría es sabida por la mayoría: se recomienda dos minutos mínimos de cepillado para que éste sea efectivo. Pero la realidad es que muchas veces nuestro día a día nos hace no cumplirlo. Lavarnos los dientes demasiado rápido aumenta además las posibilidades de dejarnos zonas sin cepillar.
  3. Usar más pasta de la necesaria
    Utilizar más pasta para cepillarse los dientes no significa cepillárselos mejor, con una cantidad del tamaño de un garbanzo, es suficiente, no hay que cubrir todo el cepillo.
  4. Enjuagarnos demasiado al finalizar
    Una vez terminado el cepillado, no es recomendable enjuagarse demasiado, ya que de este modo no se permite que el dentífrico actúe y que el flúor fortalezca el esmalte o la clorhexidina lo haga con las encías.
  5. No inclinamos suficiente el cepillo
    Hay que mantener un ángulo de 45 grados alternando movimientos circulares con movimientos desde la encía hasta el diente.  Una mala técnica de cepillado hace que no eliminemos los alimentos restantes de la boca, sino que simplemente se muevan de sitio.
  6. Cepillar los dientes justo después de comer
    Es mejor esperarnos al menos 30 minutos después de las comidas para lavarnos los dientes. Según los especialistas de ADE Group, hacerlo justo después comporta el riesgo de que esparzamos el ácido de la comida sobre los dientes, erosionándolos a medio y largo plazo, en vez de eliminarlos.

Higiene dental