miércoles, 18 de febrero de 2015

MANCHAS BLANCAS EN LOS DIENTES

Alguna vez hemos observado manchas blancas en los dientes, lo habitual es que sea causa de una descalcificación del esmalte dental, pero también puede ser que se hayan originado al formarse el diente definitivo a causa de una mineralización insuficiente o hipoplasia.  En el primer caso, casi siempre esa mancha es el inicio de una futura caries, por lo cual debemos consultar al odontólogo para que lo antes posible pueda solucionarlo. En el segundo caso, las manchas no se pueden quitar, únicamente se pueden colocar carillas estéticas. 
A veces se llega a pensar que la causa han sido los brackets, en los tratamientos de ortodoncia, pero no es así, estos aparatos no provocan manchas en los dientes, a no ser que no tengamos una correcta higiene, entonces sí que se acumula la placa dental bajo los aparatos causando una pequeña desmineralización, con lo cual, cuando se quita el aparato aparecen unas lineas blancas en la periferia de las zonas donde se colocaron las bandas o brackets, por eso el ortodoncista siempre recomendará mucha higiene y limpieza durante el tratamiento para evitar encontrarnos después sorpresas de éste tipo.


domingo, 1 de febrero de 2015

FRACTURA O CAÍDA DE UN DIENTE POR UN GOLPE



Hoy os vamos a hablar de algo que quizá a algun@ de vosotros os haya ocurrido o quizá nunca se os pasó por la mente que os pudiera ocurrir, por eso es bueno tener algo de información al respecto.

El diente permanente que se cae por un golpe algunas veces se puede colocar de nuevo en su lugar. En la mayoría de los casos, únicamente se reimplantan en la boca los dientes permanentes de los adultos. Los dientes de los bebés no se reimplantan. 
Los accidentes dentales son comúnmente causados por:
Caídas accidentales
Traumatismos relacionado con el deporte
Peleas
Accidentes automovilísticos
Masticar alimentos duros

PRIMEROS AUXILIOS
Guarde cualquier diente que haya sido sacado por un golpe y llévelo al odontólogo lo más pronto posible. Cuanto más se espere, menor será la probabilidad de que el odontólogo pueda arreglarlo. Sostenga el diente únicamente por la corona (el borde que realiza la masticación).
Usted puede llevarle el diente al odontólogo siguiendo uno de estos consejos:
Trate de colocar de nuevo el diente en la boca de donde se desprendió, de manera que quede a nivel con los otros dientes. Muerda suavemente una gasa o una bolsita de té húmeda para ayudarlo a mantenerse en su sitio. Tenga cuidado de no tragarse el diente.
Si no se puede realizar el paso anterior, coloque el diente en un recipiente y cúbralo con una pequeña cantidad de leche entera o saliva.
El diente también se puede llevar entre el labio y la encía inferiores o bajo la lengua.

Igualmente siga estos pasos:
Aplique una compresa fría en la boca y las encías para aliviar el dolor.
Aplique presión directa con una gasa para controlar el sangrado.
Acuda al odontólogo inmediatamente. 
Si el diente está muy partido, las terminaciones nerviosas pueden estar expuestas. Usted necesitará ayuda dental inmediata para evitar la infección y el dolor.
Es posible que las fracturas o desportilladuras simples que le estén causando molestia no necesiten una consulta de urgencia. Usted aun debe hacerse reparar el diente para evitar los bordes afilados que pueden cortar los labios o la lengua. 

NO SE DEBE manipular la raíz de un diente, sólo el borde con el que se mastica, el cual se conoce como corona dental.
NO SE DEBE raspar la raíz del diente para retirar la suciedad.
NO SE DEBE cepillar ni limpiar el diente con alcohol o peróxido. 

Cuándo contactar a un profesional médico

Llame al odontólogo de inmediato cuando se le parta un diente o se le caiga por un golpe. Si puede encontrar el diente, llévelo consigo a la cita con el odontólogo.
Si no puede juntar los dientes superiores e inferiores, es posible que la mandíbula esté fracturada. Esto requiere ayuda médica inmediata en un hospital o en un consultorio odontológico.
Use protector bucal al practicar cualquier deporte de contacto.
Evite las peleas o riñas.
Evite los alimentos duros como los huesos, el pan viejo y las roscas de pan endurecidas.
Utilice siempre el cinturón de seguridad.